Una mujer de 29 años acudió a una fiesta de bótox en la que se inyectó los labios y casi los pierde.
Normalmente en este tipo de reuniones las intervenciones son más accesibles, ya que de 300 euros a la mujer le cobraron 220. Rachael Knappier, fue invitada a esta fiesta por su amiga quien la convenció de inyectarse los labios.
Horas más tarde tuvo que recibir atención médica ya que presentó malestar en su labio superior, sentía presión en la cara y sus labios se le hincharon. En entrevista para el diario The Sun, Rachel aseguró que no dudó en realizarse la intervención porque su amiga le habló bien de la esteticista y aunque no pensaba hacerse nada en el rostro accedió muy rápido cuando le ofrecieron aumentar sus labios.
La mujer que le inyectó argumentó que la hinchazón se debía a una alergia. Posteriormente acudió a Londres para intervenirla quirúrgicamente, y poder salvarle el labio.
“Fue tan doloroso, que mi madre, que estaba sentada arriba en una sala de espera, podía escuchar mis gritos”.
Tres meses después, los labios de Rachael disminuyeron y casi han vuelto a la normalidad, ahora ha compartido su experiencia para que se regulen las medidas de estas prácticas, ya que solamente puede ser por alguien certificado.
