Un perro vivió en un cobertizo de madera durante un año, esperando el regreso de su amo, sin embargo esto nunca sucedió ya que había fallecido.
Cuando el dueño de Woody murió, su familia vendió su casa y dejo a Woody abandonado. El perro buscó refugio y se instaló debajo de una casita de madera, donde pudo sobrevivir gracias a la solidaridad de algunos vecinos quienes le acercaban un poco de comida y agua, mientras buscaban ayuda de alguien que lo pudiera salvar.
Un año después, la organización de rescate Hope For Paws acudió a salvar al perro que bajo las peores condiciones, había pasado días y días en la espera de su amo.
Actualmente la organización espera que Woody encuentre una nueva familia y lo puedan adoptar o hacer donaciones al conocer su historia a través de Youtube…
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