Victoria Curthoys, de Australia perdió parte de su pie luego de tomarse unas vacaciones en Tailandia y entrar a un spa de peces.
El spa en Tailandia, prometía obtener una piel suave, ya que este tipo de peces eliminan las células muertas al comérselas, sin embargo, tras su regreso, comenzó a sentirse mal y ningún médico pudo diagnosticarla a tiempo.
Tras 2 años, detectaron que a sus 29 años, había contraído una bacteria que fue contraída por el agua que se utilizó, y fue entonces que comenzó a comerse los huesos de sus pies.
Cabe resaltar, que en 2006, había contraído una infección después de pisar un pedazo de vidrio, por lo que decidieron amputarle el dedo gordo del pie. Tras visitar Tailandia, los problemas regresaron, ya que a través de una herida que tenía de su cirugía pasada, se filtró la bacteria.
Luego de 5 años, los médicos concluyeron que tenía osteomielitis, una infección en los huesos y fue entonces que le amputaron el resto de sus dedos, debido a las infecciones que había contraído y sin poder hacer nada, tuvieron que amputarlos.
“Nunca pensé que me pondría tan mal, ya que vi al propietario configurar el sistema del agua, todo era muy limpio, pero estaba muy equivocada”, declaró a Daily Mail.
Durante todo ese tiempo antes de ser diagnosticada, sufrió fiebres y enfermedades que la dejaban en la cama por semanas.
“Para cuando se dieron cuenta de lo que era, la infección había acabado con los huesos de mis dedos y yo había estado sufriendo todo tipo de enfermedades.”
Ahora luego de haber parado la infección supuestamente, lucha contra el uso de peces en los span, ya que considera que son peligrosos y pueden causar un caos en la vida de cualquier persona. Ahora a través de Instagram, comparte algunas de las experiencias que tuvo a raíz de este viaje a Tailandia.
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