Ayer Ariana Grande unió a miles de personas, amigos, artistas y al mundo entero para presenciar uno de los conciertos más emotivos de 2017. Durante el evento donde niños, jóvenes y adultos estuvieron cantando y apoyando a las familias de las víctimas de Mánchester, donde se vivieron momentos muy emotivos en cada presentación.
Robbie Williams protagonizó el primero de los momentos emotivos, cuando Take That presentó al cantante y este agradeció junto a ellos tomados de las manos, tras esto, inició su actuación con la canción “Strong”, modificando la letra en honor a Mánchester, el público al final de la presentación, corearon “Manchester, we’re strong”.
Luego de la presentación de Niall Horan, Pharrell y Miley Cyrus, apareció el mánager de Ariana Grande, Scooter Braun, quien fue parte de este emotivo concierto y con un la voz entrecortada dijo:
“Ayer por la noche esta nación fue desafiada y todos se han cuestionado, y tenían que tomar una decisión si venían aquí esta noche. Y esto es tan hermoso, ustedes tomaron esa decisión. Y al hacerlo, no dejaron que el miedo fuera más. Dijeron: ‘no, somos Manchester, y el mundo está mirando. El mal seguirá poniéndonos a prueba. Volverá a mostrarnos su rostro, pero gracia a ustedes, a su unión como una comunidad global, no tendremos miedo. Seremos fuertes y honraremos a nuestros jóvenes. Les debemos a ellos el ser valientes. El odio jamás ganará, el miedo no nos dividirá, porque hoy estamos aquí por Mánchester”.
Ariana Grande apareció en el escenario acompañada de sus bailarines, visiblemente emocionada por el apoyo que recibió no solo de sus fans, sino de todo el mundo que para ese momento eran millones de personas quienes veían el concierto.
Pero cuando llegó el turno del coro de la escuela Parrs Wood, una de las niñas comenzó a derramar algunas lágrimas, Ariana apareció sobre el escenario para acompañarlo y para consolarla, se quedó ahí hasta el final de su presentación.
Miley Cyrus y Ariana pusieron la piel chinita de todos al interpretar “Don’t Dream It’s Over”, ambas se emocionaron hasta las lágrimas. La intérprete de “Side To Side”, además compartió el escenario con Coldplay y Black Eyed Peas.
El turno de Katy Perry llegó, y lo hizo de blanco y con su mano haciendo una señal de amor y paz dijo: “Estamos aquí para esparcir el amor. No es fácil escoger el amor y más en estos momentos tan difícil, pero el amor conquista el miedo”.
Justin Bieber derramó algunas lágrimas al aparecer en el escenario para tocar “Love Yourself”, seguido de “Cold Water” y diciendo: “Al final siempre vence el amor”.
Cuando fue Coldplay, el escenario se iluminó de colores y de inmediato comenzaron las interpretaciones de: “Fix You” y “Don’t Look Back In Anger”, siendo las más emotivas. La sorpresa fue cuando el ex vocalista de Oasis apareció, Liam Gallagher, interpretó con la banda “Live Forever”.
Fue por medio de un vídeo que algunos famosos mandaron su apoyo incondicional, Paul McCartney, Demi Lovato, Camila Cabello, Kings of Leon y más.
Ariana Grande fue la encargada de cerrar el concierto, con la canción “One Last Time”, donde no pudo contener las lágrimas, por el apoyo, abrazó a cada uno de las personas que estuvieron con ella y se retiró con el corazón a mil por hora, millones de personas vieron un concierto que por unas horas logró unir al mundo con la música.
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