Taylor Swift, quien recientemente rompió récord con las ventas de su álbum 1989, decidió dar de baja toda su discografía de Spotify, según lo confirmó la propia plataforma musical a través de las redes sociales.
“Amamos a Taylor Swift y nuestros más de 40 millones de usuarios mucho más. Cerca de 16 millones de ellos tocaron su música en los últimos 30 días y la han añadido en más de 19 millones de ‘playlists’. Esperamos que cambie de parecer y nos ayude a construir una nueva economía de la música que sea beneficiosa para todos”, escribió la compañía.
“Creemos que los fans deberían poder escuchar música cuándo quieran y dónde quieran, y que los artistas tienen todo el derecho de ser pagados por su trabajo y protegidos de la piratería. Por eso es que pagamos cerca de un 70 por cierto de nuestras ganancias a la comunidad musical”.
Sin embargo, Taylor Swift no es el mejor ejemplo de las artistas que apoyan la música gratuita, a inicios de año ella escribió: “La música es un arte, y el arte es importante y diferente. Lo importante y diferente tiene valor. Las cosas con valor tendrían que tener un precio”
Además en julio de este año, Swift había declarado en “The Wall Street Journal”: “La piratería, el streaming y los archivos compartidos han reducido la cifra de venta de discos drásticamente y los artistas han manejado esto de maneras distintas (…) En mi opinión la música no debería ser gratuita y mi predicción es que algún día los artistas y sus disqueras serán quienes decidan el precio de los discos. Espero que no se subestimen a sí mismos y a su arte”.
Por tanto, Spotify ha levantado una campaña dirigida a Taylor Swift llamada #justsayyes, donde le implora a la cantante que se quede en la plataforma.
